Jean Cocteau

(1889-1963) Escritor, pintor, coreógrafo.

Frases célebres

El genio en el arte consiste en saber hasta donde podemos caminar demasiado lejos.

Es muy difícil hacer bella la felicidad. Una felicidad que sólo es ausencia de desdicha es cosa fea.

Un vaso medio vacío de vino es también uno medio lleno, pero una mentiras a medias, de ningún modo es una media verdad.

Un egoísta es aquel que se empeña en hablarte de sí mismo cuando tú te estas muriendo de ganas de hablarle de ti.

Mi pesimismo no es sino una variedad del optimismo.

Plantearse los menos problemas posibles es la única manera de resolverlos.

Lo que el público te reprocha, cultívalo. Eso eres tú.

Sentir antes de comprender.

El tacto en la audacia es saber hasta dónde se puede ir demasiado lejos.

Los espejos, antes de darnos la imagen que reproducen, deberían reflexionar un poco.

La única técnica que merece la pena dominar es la que uno mismo inventa.

La juventud sabe lo que no quiere antes de saber lo que quiere.

Dios no habría alcanzado nunca al gran público sin ayuda del diablo.

La moda muere joven.

Yo sé que la poesía es imprescindible, pero no sé para qué.

El manantial desaprueba casi siempre el itinerario del río.

Hay tres cosas que jamas he podido comprender: el flujo y reflujo de las mareas, el mecanismo social y la lógica femenina.

A Picasso, hasta los que le detestan, le soportan, porque nunca usa el talento. Sólo usa el genio. Sus obras nunca son pensamientos. Son actos.

El futuro no pertenece a nadie. No hay precursores, no existen más que rezagados.

Formarse no es nada fácil, pero reformarse lo es menos aún.

En última instancia, todo tiene arreglo, menos la dificultad de ser, que no lo tiene.

El poeta es un mentiroso que siempre dice la verdad.

Un joven no debe comprar valores seguros.

El verbo amar es difícil de conjugar: su pasado no es perfecto, su presente es sólo indicativo y su futuro siempre es condicional.