Ambrose Bierce

(1842-1914) Escritor estadounidense.

Frases célebres

Una persona aburrida es la que habla cuando deseas que te escuche.

Si deseas que tus sueños se hagan realidad ¡despierta!.

Todos son locos, pero el que analiza su locura, es llamado filósofo.

El futuro es ese periodo de tiempo en el que prosperan nuestros negocios, nuestros amigos son verdaderos y nuestra felicidad segura.

Un egoísta es una persona que piensa más en sí misma que en mí.

Una mujer sería encantadora si uno pudiera caer en sus brazos sin caer en sus manos.

Paciencia: forma menor de desesperación disfrazada de virtud.

La política es la conducción de los asuntos públicos para el provecho de los particulares.

El optimismo es la creencia de que todo es hermoso.

Matrimonio: Estado o condición de una comunidad que se compone de un señor, una concubina y dos esclavos, todo en solo dos personas.

Hacer del juego un negocio no puede compararse con el negocio del juego.

Un cobarde es una persona en la que el instinto de conservación aún funciona con normalidad.

Razonar: sopesar probabilidades en la balanza del deseo.

Planear: preocuparse por encontrar el mejor método para lograr un resultado accidental.

En asuntos internacionales, la paz es un período de trampas entre dos luchas.

El elector goza del sagrado privilegio de votar por un candidato que eligieron otros.

Abstemio: Persona débil que cae en la tentación de negarse a sí misma un placer.

La duda es la madre del descubrimiento.

No hay nada nuevo bajo el sol, pero cuantas cosas viejas hay que no conocemos.

Las citas son una manera de repetir erróneamente las palabras de otro.

La guerra es un método de desatar con los dientes un nudo político que no se puede deshacer con la lengua.

El que se ve en una situación peligrosa piensa con las piernas.

Autoevidente: evidente para uno mismo, pero no para los demás.

No tomes el nombre de Dios en vano; escoge el momento en que tenga efecto.