Frases sobre el suicidio
Abandonarse al dolor sin resistir, suicidarse para sustraerse de él, es abandonar el campo de batalla sin haber luchado.
El suicidio sólo debe mirarse como una debilidad del hombre, porque indudablemente es más fácil morir que soportar sin tregua una vida llena de amarguras.
Los que matan a una mujer y después se suicidan debían variar el sistema: suicidarse antes y matarla después.
Un torturador no se redime suicidándose, pero algo es algo.
El suicidio es una bancarrota fraudulenta.
Suicidarse es subirse en marcha a un coche fúnebre.
El suicida es el antípoda del mártir. El mártir es un hombre que se preocupa a tal punto por lo ajeno, que olvida su propia existencia. El suicida se preocupa tan poco de todo lo que no sea él mismo, que desea el aniquilamiento general.
Matarse por no morir es ser igualmente necio y cobarde.
Que piensen lo que quieran, pero no pretendía ahogarme. Tenía intención de nadar hasta hundirme –pero no es lo mismo.
El suicidio no es abominable porque Dios lo prohíba; Dios lo prohíbe porque es abominable.
El único problema filosófico verdaderamente serio es el suicidio. Juzgar si la vida es o no digna de vivir es la respuesta fundamental a la suma de preguntas filosóficas.