Refranes

Quien tiene tejado de vidrio, no tire piedras al de su vecino.

A camino largo, paso corto.

A falta de pan buenas son tortas.

Uno levanta la caza y otro la mata.

Abril, aguas mil.

Cada oveja con su pareja.

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar.

De aquellos polvos vienen estos lodos.

Desnudo nací, desnudo me hallo: ni pierdo ni gano.

Nuestro gozo, en un pozo.

Los casamientos y las viñas, deprisa

El que roba a un ladrón tiene cien años de perdón.

El que tuvo, retuvo, y guardó para la vejez.

En boca cerrada no entran moscas.

La ocasión hace al ladrón.

Los niños y los locos dicen las verdades.

Mal de muchos, consuelo de tontos.

Manos blancas no ofenden.

Más vale tarde que nunca.

No hay peor sordo que el que no quiere oír.

Quien bien quiere a Beltrán, bien quiere a su can.

A grandes males, grandes remedios.

Afortunado en el juego, desgraciado en amores.

Cada uno en su casa y Dios en la de todos.